Rostro 14

¿Buscas inspiración para decorar tu casa? Te recomendamos este cuadro que representa un retrato humano desde una perspectiva íntima y subjetiva. La figura, de formas simplificadas y trazos marcados, se presenta en primer plano, destacando por su expresividad emocional y su tratamiento cromático audaz.

El rostro de esta figura abstracta, trabajado en tonos ocres y marrones con una textura visual densa y modelado plano, muestra una expresión ambigua: entre la calma, la extrañeza y una sutil melancolía. La nariz, en un tono naranja brillante, y una pequeña forma circular en los labios, posiblemente una flor o un gesto simbólico, actúan como focos visuales dentro de la composición.

La figura de la ilustración viste una camisa verde esmeralda de trazo suelto, que introduce un contraste cromático vibrante con el fondo rojo intenso que rodea completamente al personaje. El cabello oscuro, representado con líneas cortas y gruesas, enmarca el rostro y añade volumen sin necesidad de detalle realista.

El uso del color plano del cuadro arte contemporáneo y los contornos deliberadamente imperfectos otorgan a la obra una estética naïf y expresiva que invita a la contemplación, más allá de la representación literal. Esta pieza es ideal para espacios que valoran el arte con personalidad y emoción, como estudios creativos, galerías personales o ambientes modernos con carácter artístico.

Reproducción de pintura al óleo del año 1985.

La impresión de esta obra se ha realizado mediante la técnica Gyclée en la cual se obtiene la máxima calidad de impresión a través de la inyección de tinta directa sobre la lámina. Ilustración impresa sobre papel Epson Enhanced Matte de 190g/m2.

Este cuadro esta disponible en dos tamaños: 30x40cm y 50x70cm.

Arte producido en Barcelona.

Marco no incluido en la compra del print decorativo.


Disclaimer: todos los prints parten de obras originales algunas con más de 40 años de antigüedad. Debido al estado de conservación de las obras originales los prints pueden contener ligeras marcas del paso del tiempo como puntos sin pigmento, zonas decoloradas, marcas de humedad, etc. Todo ello forma parte de la obra original y no ha sido restaurado por petición del pintor. El paso del tiempo es uno más de los elementos que conforman la obra.